~[ Adiccion]~: Capitulo 1

Titulo: Adiccion

Autor: baby_MinJung
Genero: Yaoi + Vampírico
Rating (Edad): + 18
Personages: TVXQ + SuperJunior

Advertencias: Es una adaptacion realizada de la novera Medianoche.

Resumen: ¿Qué ocurrirá cuando se unen vampiros y humanos en un mismo instituto?

CAPITULO 1

-                     En las noticias de las 21, el meteorólogo había confirmado que hacia la media noche aparecería del todo la tormenta… y aquí estaba, medianoche… la tormenta había llegado.


Las nubes grises y oscuras corrían sin rumbo por el cielo… uniéndose unas con otras… tapando poco a poco el cielo… cubriendo ese manto de estrellas, esas estrellas que tanto me gustan. El viento ya azotaba fuerte colándose por mis ropas, enfriando poco a poco mi cuerpo… moviendo mi pelo castaño, haciendo que algunos pelos se movieran rozando mis mejillas… haciendo un poco de cosquilla… provocando una sonrisa en mi cara. Me coloqué la capucha del chubasquero y metí mi mochila debajo.


Medianoche aún seguía sin estar del todo a oscuras, y eso que la tormenta estaba prácticamente encima. Lo malo de todo esto, es que los profesores de la academia podían ver en la oscuridad, y peor aún, podían escuchar a través del viento… en sí, todos los vampiros podían hacerlo…


Claro está, en la Academia Medianoche, los profesores no eran los únicos vampiros que habían. En un par de días, comenzaría el curso nuevo y los estudiantes comenzarían a llegar. La mayoría de ellos era igual de poderosos, ancianos e inmortales que los profesores.


Yo no soy ni poderoso ni anciano, aún me quedaban cientos de años para que eso ocurra. Pero soy un vampiro en cierto modo, hijo de dos vampiros, destinado a llegar a ser uno de ellos finalmente, y claro está, con mi propio apetito de sangre. En otro momento me habría paseado por delante de los profesores, confiando en mis poderes me ayudaran… pero esta noche, estoy pendiente de esta oscuridad que aún no llega… necesito que cubra todo lo máximo posible.
Supongo que estoy nervioso por mi primer robo.


Bueno, la palabra “robo” hace que mi acto suene bastante ordinario, como si únicamente fuese colarme en casa del director Lee y saquear el lugar buscando dinero o joyas o vete tú a saber... pero yo tenía otra razón para hacerlo, una razón más importante.


El agua comenzaba a hacerse presente… la lluvia comenzaba a caer mientras el cielo se oscurecía poco a poco del todo...por fin llegaba la oscuridad que necesitaba… Salí corriendo a través de los terrenos de la academia, echando un par de miradas hacia las torres de piedra del edificio mientras me iba. Me dejé arrastrar a través del césped mojado y resbaladizo y ahí fue cuando sentí algo de miedo…


¿Jae, en serio?... ¿Vas a colarte en su casa?... ¿Irrumpir en la casa de alguien… tú?” “Si incluso no te descargas música que no puedas pagar...


La verdad es que todo era bastante surrealista. Me puse a rebuscar en el interior de mi mochila buscando algo con lo que poder abrir la puerta… después de un rato, encontré la tarjeta de la biblioteca… a la cual daría hoy otro uso que el de sacar libros… estaba decidido… lo haría. El director Lee tan solo dejaba la escuela tres noches al año, lo que significaba que esta noche era mi oportunidad. Deslicé la tarjeta por el marco de la puerta y empecé a hacer palanca a la altura de la cerradura.


Cinco minutos después, aún seguía meneando la tarjeta de la biblioteca sin respuesta… mis manos ahora estaban mojadas y por ello y por el aire, las tenía heladas fallándome un poco en el intento de abrir…


- Maldita sea!! en la tele, esta parte parecía mucho más fácil…


Seguramente, cualquier ladrón con experiencia, lo con seguiría en pocos segundos… de cualquier forma, a cada segundo que pasaba era más evidente que yo era el polo opuesto al de un criminal con más experiencia.


Ya que el plan A no había funcionado, tenía que buscar un plan B...otra opción que me sirviera. ¿Las ventanas?... bueno, estas no parecían mucho más prometedoras que la puerta. Seguramente, podría haber roto el cristal y abrir una de ellas en unos minutos, pero… la parte del plan que decía “que no te atrapen”… se hubiera echado a perder.


Me puse a caminar… y al parecer, la suerte no me había abandonado del todo, ya que al doblar la esquina, pude ver que el director Lee se había dejado una ventana abierta… y aunque fuera solo una rendija… me sobraba, ya que podía deslizarla hacia arriba...


Mientras la deslizaba, pude ver una serie de lirios blancos colocados en sus macetas, situados en la repisa de la ventana. Supongo que el director Lee los dejo ahí para que pudieran recoger algo de lluvia y respirar aire fresco. Se me hacía extraño pensar que el director Lee se ocupada de algo con vida… Poco a poco aparté las macetas a un lado haciendo espacio para poder subir a la ventana.


¿Entrar a través de una ventana?... Sí, eso también resulto ser mucho más difícil que en la tele, y más aún para alguien tan patoso como yo.


Las ventanas estaban bastante arriba del suelo, lo que significaba que para poder entrar por ella tenía que, en cierto modo, saltar. Jadeando, empecé a meterme por ella, era un poco difícil no caer al suelo de dentro. Intenté bajar primero con un pie. Pero me caí de la ventana precipitadamente, y no podía volver a medio camino. Uno de mis zapatos lleno de barro le pegó un golpe a la ventana, aún doy gracias a Dios a que el cristal no se rompiera. Baje del todo y me dejé caer completamente en el suelo.


- Ok… - murmuré mientras estaba sobre la alfombra del director Lee.
Mis pies seguían estando apoyados en la repisa de la ventana, empapados de la lluvia… y llenos de barro.


- Demasiado difícil para ser la parte fácil…


La casa del director Lee tenía un aspecto parecido al de él, sentía frio como él, e incluso olía igual que él, a un fuerte olor a tabaco. Me di cuenta de que estaba en su habitación, y de alguna forma, eso me hacía sentir como un intruso. A pesar de que sabía que el director Lee había viajado a París para visitar a algunos “posibles alumnos”, no podía evitar sentir que él me podía pillar en cualquier segundo. Tenía miedo de que me atraparan… no podía evitar acurrucarme y perderme en mí mismo…


Y luego pensé en YunHo, el chico que había amado… y que había perdido.
YunHo no habría querido que estuviera asustado…todo lo contrario, hubiese querido que fuese fuerte. Recordarlo en ese momento me dio valor, y me animo a conseguir lo que había ido a buscar allí.


Primero de todo me quité los zapatos que llevaba, estaban enfangados y podían dejar huellas por toda la casa. Además, me quité el chubasquero y lo colgué, evitando así llenar todo el suelo de agua. Luego caminé hasta el baño, cogí algunos pañuelos de papel y limpie el desastre que había armado, y también mis zapatos. Cuando acabé, metí los pañuelos en el bolsillo de mi chubasquero… había pensado en que podría tirarlos en otro lugar. Estaba seguro de que el director Lee era lo bastante paranoico como para buscar indicios de que había entrado alguien en su casa… así que todo tenía que estar perfecto.


- Aún me sorprende que él haya decidido vivir aquí…


La Academia Medianoche era magnifica, incluso grandiosa, con todas esas torres de piedra con sus gárgolas… muy de su estilo. Sin embargo, este lugar era apenas una casita… eso sí, aquí había privacidad…


Su escritorio de la esquina parecía el lugar perfecto para empezar a buscar. Me senté en la silla, apoyando la espalda en el duro respaldo de ésta. Aparté un marco de plata que allí había, y empecé a ojear papeles que encontré por ahí encima...


- “Queridos padres, hemos revisado con gran interés la solicitud de su hijo Ryeowok. A pesar de que es obviamente un estudiante excepcional y un agradable joven, lamentamos informarle…”


- ¿Un estudiante humano que quería venir aquí?... el director Lee lo había rechazado - ¿Por qué permitía que algunos humanos asistiesen a la Academia Medianoche y otros no? ¿Por qué permitía a algún humano entrar en una de las pocas fortalezas de vampiros que quedaban?


- “Queridos padres, hemos revisado con gran interés la solicitud de su hijo Key. El es obviamente un estudiante excepcional y un agradable joven, así que estamos complacidos de...”


- ¿Cuál era la diferencia entre Ryeowok y Key?


Gracias a Dios, el sistema de archivo que utilizaba el director me ayudó a encontrar a sus solicitudes, pero después de media hora leyéndolas, no encontré ninguna respuesta. Ambos tenían una calificación media tan alta que ponía los pelos de punta y un kilo de actividades extracurriculares… al leer todo esto me di cuenta de que era el chico más vago del mundo. En sus fotos se les veía bastante normales, no eran guapísimos, no eran feos, ni estaban gordos, ni delgadísimos, simplemente eran normales. Los dos eran de Corea. Ryeowok vivía en un apartamento edificado en Seul, y Key en una vieja casa en el campo en Jeju, pero lo único que sabía, es que los dos tenían que ser horrorosamente ricos para pensar en venir a Medianoche.


Lo único que podía decir, es que Ryeowok era el afortunado. Sus padres lo enviarían a un internado de lujo en la Costa Este, donde se mezclaría con otros chicos de su misma clase. Mientras que Key estaría rodeada vampiros a cada segundo. Incluso aunque él no lo supiera, el tendría la sensación de que algo no funcionaba bien. No se sentiría seguro nunca, incluso yo nunca me he sentido bien en esta academia, y algún día tendría que convertirme en uno de ellos.


Las ventanas se iluminaron, y un par de segundos más tarde se escuchó el trueno. La tormenta pronto se haría más fuerte, así que era la hora de volver. Estaba decepcionado… cogí las cartas y las arreglé, dejándolas como estaban.
Estaba segurísimo de que encontraría respuestas… pero tan solo logré saber una cosa… que al director Lee le gustaban los lirios blancos, una información REALMENTE útil para mí.


Coloqué los lirios en su lugar y me marché por la puerta de enfrente, la cual, afortunadamente para mí, se cerraba de forma automática…


El viento azotaba la lluvia hacia mis mejillas mientras corría hacia la Academia Medianoche. Unas pocas ventanas de los apartamentos de la facultad resplandecían, pero no era lo suficientemente tarde como para que estuviera preocupada porque alguien me viera. Apoye mi hombro contra la puerta de roble, y se abrió sin hacer mucho más que un chirrido. La cerré tras de mí… y suspiré creyendo que el peligro se había ido… hasta que me di cuenta de que no estaba solo…

 

Continuará!